En la Marcha del Orgullo 2024 ocurrió un signo extraordinario en el camino de Padis+ y Padis+ Padres. Impulsados por lo que el papa Francisco ha señalado sobre las bendiciones a las parejas de la diversidad, laicas, laicos, una religiosa y varios sacerdotes compartieron este signo. Fue Jesús en medio del gentío quien se manifestó.
Les compartimos el testimonio de una mamá y un papá, que fue leído en la celebración de los 12 años de Padis+Padres, en la Iglesia San Ignacio en Santiago.
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Hola, queremos compartirles lo que fue para nosotros la experiencia en la pasada Marcha del Orgullo.
En nuestra última reunión de Padis+ Padres, se planteó que en esta oportunidad no podíamos ir a la Marcha del Orgullo como otros años, en que de alguna manera habíamos mostrado que la Iglesia estaba con la diversidad. No obstante, en esa última reunión, sentimos que no podíamos seguir “prestando ropa” a la Iglesia sin que hubiera una señal clara de que, su jerarquía, también estaba transitando hacia la aceptación de las personas con orientación sexual diversa.
Fue en ese momento de reflexión en que se produjo el primer milagro. Rodrigo García sj propuso participar en la Marcha y ofrecer a quienes quisieran bendiciones de parejas y de personas de la diversidad. ¡No lo podíamos creer!
Con esta idea, todes nos pusimos a trabajar para convertirlo en realidad. Se hizo una gran cruz de madera que nos guio en medio del gentío que caminaba por la Alameda; se confeccionó un símbolo para entregar a los bendecidos, la cruz de la diversidad (se confeccionaron casi 100). Mientras, varios de nuestra comunidad Pastoral se hicieron disponibles para bendecir. Participaron cuatro sacerdotes: Guillermo, Rodrigo, Claudio y Álvaro, junto con nuestra querida y fiel Quena, Religiosa del Sagrado Corazón de Jesús, además de otres que acompañaron y acogieron a quienes iban a ser y fueron bendecidos.
Fuimos testigos de la presencia real de Jesús en este acontecimiento.
Debemos confesar que partimos expectantes y asustados. Nos preguntábamos cómo sería la acogida de los marchantes frente a este signo. Al llegar a la Plaza Dignidad fueron desapareciendo nuestros sustos hasta que ocurrió el milagro: varios comenzaron a acercarse para pedir la bendición. Otros miraron de lejos y sonreían, y cuando les invitábamos, aceptaron recibir el signo y lo agradecieron. Otros más nos observaban y agradecieron lo que hacíamos, pero sin acercarse a la bendición. Sin embargo, nos motivaban a continuar en la tarea de acercar la Iglesia a la Diversidad.
Entre tantos testimonios, quisiéramos destacar dos. El primero, el de un muchacho trans que solicitó la bendición. En ese instante los sacerdotes estaban ocupados, así que un laico de Padis+ –Francisco Covarrubias– le acogió y le dio la bendición. Nos dimos cuenta de que el muchacho tenía múltiples lesiones en uno de sus brazos, quizás unos 20 cortes. Fue conmovedor ese momento, el que siguió con un abrazo y la entrega de la cruz de la diversidad. ¡Nos sentimos verdaderamente emocionados!
El segundo testimonio fue el de otro muchacho de la diversidad que marchaba junto a su hermana quien sostenía la foto de otro hermano recientemente fallecido. Tenía VIH. Guillermo ofreció a la pareja de hermanos y a quien había partido la bendición. Ambos agradecieron el signo. El abrazo fue emotivo, lleno de cariño y acogida.
Estas y las demás bendiciones fueron un milagro en medio de la Marcha del Orgullo, nos sentimos un instrumento del Señor para que ocurriera. Los días posteriores nos hemos sentido con energía, felicidad y con la alegría de saber que Jesús estuvo con nosotres.
Damos gracias a Dios por su presencia y lo vivido ese día.
Margarita Cabello S. y Rodrigo López V.
Padis+ Padres